El Ultimo Adios de Scorpions
La noche empezó con la canción que da nombre al álbum que editaron este año. El primer tema sirvió como muestra de lo que sería el resto: la banda sonó impecable y a la potencia de la música se sumó la interacción de los cinco sobre el escenario. El setlist siguió con los clásicos Make it Real, Bad Boys Running Wild y The Zoo. A esta altura Klaus Meine ya estaba sumergido en un ida y vuelta de coros con los fans y hasta cerró un tema cantando los últimos versos a capela.
“Buenas noches Argentina”, saludó Meine antes de presentar The Best is Yet to Come, la primera balada del show. “Hace mucho tiempo vimos cómo cambiaba el mundo, era el fin de la guerra fría”, explicó el frontman de Scorpions antes de que Wind of Change empezara a escucharse. Y después les llegó el turno a Raised on Rock, Tease Me Please Me y la estruendosa Dynamite.
Uno de los puntos más altos fue el Kottak Attak. Por unos cuantos minutos el baterista de la banda se quedó solo en el escenario mostrando todo lo que sabe hacer, que es mucho. En la pantalla detrás de Kottak se veía un video con distintas imágenes, incluso varias en las que estaba él. Después de la tremenda demostración agarró el micrófono y dijo “Simplemente tres palabras: ustedes la rompen” (En realidad dijo you kick ass, pero esa sería una traducción bastante aceptable). Y siguió entreteniendo a la gente del Luna: “Repitan conmigo: Salud a los Scorpions”.
El batero no fue el único que tuvo su momento de gloria, después de Blackout llegó el turno de Six String Sting, el instrumental que tuvo al guitarrista Matthias Jabs como protagonista. Big City Nights fue la canción que el grupo eligió tocar antes de los bises, casi dos horas después de que empezaron a tocar. Para el final se guardaron dos joyitas: Still Living You y Rock You Like a Hurricane, que la saltó todo el estadio. Y así se despidieron de nuestro país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario